El mercado del oro no ha podido mantener sus ganancias en los máximos de la sesión, incluso cuando los precios se mantienen sólidamente por encima de los 4.200 dólares la onza, después de que la Reserva Federal de Filadelfia informara una fuerte contracción en su encuesta manufacturera regional.
Se espera que el informe aumente la creciente incertidumbre en torno a la salud de la economía estadounidense; sin embargo, las perspectivas están lejos de ser definitivas.
El banco central regional anunció que su perspectiva del sector manufacturero para octubre bajó a -12,8, tras una fuerte recuperación en septiembre, que llegó a 23,2. Los datos fueron mucho más débiles de lo esperado, ya que los economistas esperaban una lectura de 8,6 este mes.
El informe muestra que la actividad en la región ha caído a su nivel más bajo desde abril.
“El índice de actividad general actual de la encuesta cayó significativamente y se volvió negativo, compensando con creces el aumento del mes pasado”, señala el informe. “El 25 % de las empresas reportaron disminuciones en la actividad general este mes (frente al 17 % del mes pasado), mientras que el 12 % reportó aumentos (frente al 40 % anterior); el 58 % no reportó cambios (frente al 43 %)”.
El mercado del oro continúa experimentando una volatilidad moderada, a medida que mantiene un importante impulso alcista. Los datos económicos han tenido poco impacto en la acción del precio; sin embargo, los analistas señalan que los datos decepcionantes seguirán respaldando el atractivo del metal precioso como refugio seguro.
El oro al contado cotizó por última vez a 4.230,80 dólares la onza, un 0,56% más en el día. Aunque la cifra principal fue peor de lo esperado, los componentes del informe fueron dispares. El Índice de Nuevos Pedidos subió a 18,2, frente al 12,4 de septiembre. Mientras tanto, el Índice de Envíos cayó drásticamente a 6, frente al 26,1 del mes anterior.
El mercado laboral también perdió algo de impulso: el índice de número de empleados cayó a 4,6, desde la lectura de 5,6 de septiembre.
Si bien la actividad manufacturera en la región se ha desacelerado, las presiones inflacionarias se mantienen elevadas. El informe indicó que el Índice de Precios Pagados (IPP) subió a 49,2, frente al 46,8 de septiembre.
Si bien la encuesta de la Reserva Federal de Filadelfia destaca los crecientes riesgos a la baja para la economía, el panorama general sigue siendo incierto. El miércoles, la Reserva Federal de Nueva York anunció que su Encuesta de Manufactura del Empire State subió a 10,7 en octubre, una marcada mejora respecto a la lectura negativa de 8,7 de septiembre.
Kitco