En lo que va del año, el precio del oro se ha disparado cerca de un 25% y, en el camino, se ha hecho de una chiquitilla de récords, superando la marca de los US$3.500 la onza.
Impulsado como activo refugio en medio de la incertidumbre geopolítica global, el precioso metal ha despertado el apetito minero en todo el mundo; también en Chile, que lo extrae en un 70% como subproducto de cobre y donde se pronostica un aumento de la producción de -al menos- 25% en 2025.
La subida marcará un retorno a niveles que no se veían hace 10 años y que llevarían al país a ubicarse entre los 20 mayores productores de oro del mundo.
El director ejecutivo de Plusmining, Juan Carlos Guajardo, evita hablar de una “fiebre del oro”, porque “tiene un incremento en la producción que tiene un componente más estructural, no es sólo un asunto relacionado con los buenos precios”, explica.
Es que en un timing perfecto, inversiones y proyectos exclusivos del sector aurífero -no cobre- que fueron anunciados hace años en Chile, están empezando a dar frutos. También ha habido anuncios recientes, que evidencian “el renovado interés por distritos que son grandes cinturones de oro”, dice Gajardo.
Salares Norte y el Top 20
Inaugurada en 2024, la mina de oro salares Norte de la gigante sudafricana Gold Fields -el primer proyecto greenfield del sector en una década- estima para 2025 una producción de 350.000 onzas, unas 10 toneladas de mineral.
La cifra mueve la aguja. Considerando que en 2024 Chile produjo 36 t de oro, según Cochilco, el solo aporte de Salares Norte representa un alza de 25% este año. La última vez que la producción a aurífera chilena sobrepasó las 40 toneladas fue en 2016 y el mejor registro histórico data de 2000, con 54 toneladas.
Según comentaron desde la minera al Diario Financiero, las 10 toneladas del proyecto representan cerca de un 15% de la producción total de Gold Fields y “permitirán a Chile posicionarse dentro de los 20 mayores productores de oro del mundo”.
Hasta ahora, el país se mueve entre el número 28 y 30 del ranking, aportando con un porcentaje en torno al 1,2% del total mundial. Lideran la lista China con 380 t, Rusia con 310 t y Australia con 290 t.
“Efectivamente Chile aspiran entrar al Top 20, aunque hay que ver lo que pase con los otros productores, pero sin duda nos acercamos mucho”, dice Guajardo.
Los planes de la sudafricana son de largo plazo. “Más aún en un país como Chile, con un distrito minero de clase mundial y que cuenta con estabilidad política y económica para nuevas inversiones. Ejemplo de ello es que Gold Fields proyecta una inversión de MUS$50 para 2025 y 2026”, indicó la compañía.
Otros proyectos clave:
Emplazado en el cinturón aurífero Maricunga, Rio2 lleva un 19% de avance en la construcción de su proyecto Fénix Gold de MUS$235, cuyo inicio de producción se estima para inicios de 2026.
La compañía espera, durante su primer año de operación, al alcanzar una producción de aproximadamente 62.000 onzas de oro (1,8 t), incrementándose a 109.000 onzas (3 t) en 2027.
“Estos niveles representan una contribución relevante en la producción de Chile y confiamos en que Fénix Gold se consolidará como un actor importante en la industria aurífera”, dijeron desde Rio2.
Por otro lado, la semana pasada, Mantos de Oro, 100% propiedad de Kinross, ingresó un proyecto de MUS$113 para extender la vida útil de sus faenas La Coipa y Purén en al menos cinco años.
En carpeta, aunque aún sin estudios aprobados, figuran Lobo-Marte de Kinross y Nueva Esperanza de Kingsgate Consolidated.
En una fotografía de largo plazo, el director ejecutivo de Núcleo Minero, Álvaro Merino, anotó que la proyección de inversiones en la minería del oro ha disminuido sustancialmente: si para la década 2012-2024 representa un 19% del total del sector minero del país, en el periodo 2024- 2033 cae a un 2%. De todas formas, agregó que “la minería del oro se encuentra en una posición expectante” y que “una vez que se despeje la burocracia de la tramitación de proyectos de inversión (…) el oro brillará en la minería chilena”.
Diario Financiero